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Según se estima, la hiperhidrosis, comúnmente denominada sudoración excesiva, afecta a entre el 0,6 y el 2,8% de la población(1), (2). La definición de hiperhidrosis se refiere a un fenómeno de aceleración del mecanismo de producción de sudor bajo la influencia de distintos factores.
Contenido
¿Qué es la sudoración? Se trata de un fenómeno natural y esencial para nuestro organismo. Su función principal es regular la temperatura corporal para mantenerla a 37 °C. Nuestro cuerpo produce calor de forma natural, pero cuando la temperatura interna aumenta, tras un esfuerzo físico, por ejemplo, el proceso de sudoración se activa para evitar el sobrecalentamiento. Constituye, en cierto modo, un sistema de refrigeración natural.
El hipotálamo, una zona del cerebro, es responsable de este proceso de termorregulación y actúa como una especie de termostato central. Cuando la temperatura del cuerpo aumenta, se desencadena el proceso de sudoración a través del sistema nervioso, activando las glándulas suprarrenales para que produzcan sudor.
El sudor es producido por las glándulas sudoríparas. Son unas pequeñas glándulas presentes en la dermis de la piel.
El cuerpo está cubierto por unos 4 millones de glándulas sudoríparas, y las hay de dos tipos:
Cuando sudamos, nuestro cuerpo libera sudor a través de los poros de la piel. La composición del sudor depende de muchos factores, como la predisposición familiar e individual, y la dieta. El sudor contiene un 99% de agua, minerales y algunos residuos corporales (urea, etc.). Su pH es ácido, cercano al pH fisiológico de la piel (5,5).
Si la sudoración es un fenómeno natural y esencial para nuestro cuerpo, entonces, ¿Qué es la hiperhidrosis? La definición de hiperhidrosis nos indica que es una enfermedad de la sudoración. Las personas afectadas sufren de hipersudoración.
Esta enfermedad, que provoca una sudoración excesiva en hombres y una sudoración excesiva en mujeres, no siempre está asociada a una causa identificable y puede aparecer durante la infancia o la adolescencia. También existe otro tipo de hiperhidrosis secundaria, inducida por una enfermedad o un tratamiento. Determinar la causa precisa de la sudoración excesiva y los factores que la favorecen, así como tratarla puede ayudar a mejorar la hipersudoración.
En el 90% de los casos, la hiperhidrosis es localizada y bilateral, es decir, que afecta a ambos lados del cuerpo de forma simétrica. Cuando así es, el fenómeno solo afecta a determinadas zonas del cuerpo: manos, pies, cara, axilas. En más raras ocasiones, puede generalizarse y afectar a todo el cuerpo. Si la hiperhidrosis aparece de forma repentina durante la edad adulta, es muy probable que sea secundaria a otra enfermedad. En caso de manifestarse, conviene pues consultar a un médico para determinar su causa.
No existe una definición de hiperhidrosis exacta porque no hay una cantidad determinada de sudor a partir de la cual se pueda hablar de esta. Por tanto, se suele hablar de sudoración excesiva o hipersudoración cuando este fenómeno se convierte en una verdadera molestia en el día a día: cuando uno ya no se atreve a tender la mano para saludar, a vestirse como quiere, a practicar un deporte por miedo a sudar, a salir de casa cuando hace un poco de calor, entre otras situaciones.
Muy incapacitante para quienes la padecen, la hiperhidrosis puede provocar un verdadero retraimiento social y tener un gran impacto en la vida cotidiana. La sudoración excesiva suele asociarse injustamente a la falta de higiene, por lo que la mirada de los demás puede ser difícil de soportar. Con frecuencia, la vergüenza impide que la gente consulte al respecto con su médico. De hecho, se estima que solo un 38 %(3) de las personas afectadas ha hablado de su problema con un profesional de la salud. Sin embargo, ¡existen soluciones muy eficaces para ello!
(1) Stolman LP.Treatment of hyperhidrosis. Dermatol Clin 1998;16:863-9
(2) Münchau A, Bhatia KP. Uses of botulinum toxin injection in medicine today. BMJ 2000;320:161-5
(3) Strutton D.R., Kowalski J.W., Glaser D.A., et al.: US prevalence of hyperhidrosis and impact on individuals with axillary hyperhidrosis: results from a national survey. Journal of American Academy of Dermatology, 2004, 51: 241–248