El acné afecta principalmente a los adolescentes, pero también a otros grupos de personas, especialmente a los lactantes. Puede parecer extraño, pero es muy común. Sin embargo, ¡no debe ser motivo de preocupación para los jóvenes padres!
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El acné del lactante es una forma de acné que afecta a los bebés, esencialmente entre los 0 y 3 meses. Pasada esta edad, es más comúnmente conocido como acné infantil. La cara del bebé aparece cubierta de pequeños granos, tanto comedones como lesiones inflamatorias típicas del acné. Este acné de los bebés dura unas semanas, a veces unos meses, y desaparece con la misma espontaneidad con la que surgió. El acné del lactante no causa molestias al bebé ni le impide crecer con normalidad. Un bebé que presenta acné no tiene mayor riesgo de padecerlo durante la adolescencia.
Al parecer, el acné del lactante se debe a los cambios hormonales que se producen inicialmente en la madre durante el embarazo. El acné del lactante también se ve favorecido por la aplicación de cosméticos demasiado grasos. Los padres suelen pensar que existe una relación entre el acné del lactante y la lactancia, el acné del lactante y la leche materna, el acné del lactante y el uso de ciertos tipos de leche de fórmula. Sin embargo, la alimentación no interviene en absoluto en el acné del lactante, por lo que no hay necesidad de cambiar la dieta del bebé.
En general, el tratamiento del acné del lactante no requiere la aplicación de ningún producto en particular, sino más bien la aplicación del sentido común:
