¿Se debe quitar la costra láctea?
La costra láctea en los lactantes es una enfermedad de la piel benigna y sin gravedad. Es una patología muy común que, afortunadamente, no genera ningún tipo de molestia o incomodidad en los pequeños. Algunos padres desean quitar la costra láctea por razones de estética y por su aspecto desagradable, pero hay que procurar no rascar nunca las costras en seco: este gesto puede irritar aún más el cuero cabelludo, ya de por sí fragilizado, y conlleva además un riesgo de infección debido a la manipulación.