Como su nombre indica, el picor nocturno se produce por la noche, mientras la persona duerme... ¡o intenta dormir! En efecto, el prurito nocturno perturba el sueño, causando tanto dificultad para conciliarlo como despertarse durante la noche. Todo ello se traduce en un sueño de peor calidad y muchas consecuencias durante el día: cansancio, dificultad para concentrarse, irritabilidad... Identificar el origen del picor nocturno permite gestionarlo mejor y volver a dormir bien. ¡Hagamos un balance!
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Sentir que la piel pica al final del día y por la noche puede ser signo de un gran número de afecciones, tanto dermatológicas como no dermatológicas. Algunos ejemplos de enfermedades que provocan picor nocturno son:
Factores externos como el calor, el roce con las sábanas o las alergias a determinados componentes de la ropa de cama pueden explicar el agravamiento de algunos tipos de picor por la noche.
El picor nocturno tiene consecuencias para el sueño, el comportamiento diurno y también para la piel. De hecho, las lesiones de rascado suelen ser más importantes cuando se siente picor en la cama, ya que la persona se rasca con más intensidad sin siquiera darse cuenta. Por eso, es importante encontrar soluciones para aliviar el picor nocturno.
Cuando se sufre de picor nocturno, es fundamental consultar a un médico para determinar la causa del prurito. Puede tratarse de una infección por el sarcoptes de la sarna, en cuyo caso hay que instaurar rápidamente un tratamiento antiparasitario para evitar que se propague la plaga. El cáncer también constituye una causa rara pero posible de picor nocturno, así que su diagnóstico precoz permite implementar un tratamiento adaptado y un mejor pronóstico. Una vez identificada la causa del picor, hay que seguir rigurosamente la prescripción del médico.
Por otra parte, aliviar el picor nocturno implica poner en práctica nuevos hábitos beneficiosos para la piel. A continuación incluimos algunos consejos sencillos para atenuar el picor y dormir mejor por la noche: